March y Versa eran exportados de México y ahora nacen mas cerca… en el estado de Río de Janeiro
Luego de que Nissan realizara las primeras exportaciones de vehículos de la planta de Resende en 2016 a países de América Latina; llegan a la Argentina los primeros vehículos dirigidos al mercado nacional. Más de 2,000 unidades de Nissan March y Nissan Versa fueron enviadas al país para satisfacer la demanda local.
José Luis Valls, chairman de Nissan Latinoamérica, destacó que «Resende es una planta moderna, con estándares estrictos de calidad, elegida para convertirse en una plataforma de exportación para toda la región de América Latina. La planta se construyó con el propósito de ofrecer calidad y tecnología japonesa a lo largo de toda la región». Desde abril de 2016, la planta de Resende exporta autos a países latinoamericanos como Bolivia, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, Paraguay, Uruguay y, ahora, Argentina.
El ejecutivo espera duplicar el volumen de exportaciones y ampliar el número de países que reciben autos brasileños en el año fiscal 2017. «La región tiene un enorme potencial para Nissan. Nuestros equipos se están preparando para satisfacer un aumento en la demanda regional en los próximos años convirtiendo a Resende en un polo de exportación clave para la compañía», agregó.
El Complejo Industrial de Resende
Operando desde abril de 2014, el nuevo Complejo Industrial de Resende le permite a Nissan fabricar más automóviles con una mayor tasa de componentes locales. Como resultado, la planta tiene toda la infraestructura para recibir a sus proveedores de equipo original. Concentrándose en la calidad, Nissan decidió establecer todo el proceso de producción en el Complejo de Resende, con el fin de cumplir con sus altos estándares globales de producción. A diferencia de otros fabricantes de automóviles locales, Nissan tiene su propio taller de enmascaramiento de carrocería y de moldeo por inyección de materiales plásticos, cuyas operaciones complejas exigieron inversiones considerables. Dado que están integrados al proceso de manufactura, la compañía ahorra tiempo, mejora la calidad y la flexibilidad productiva, además de reducir los inventarios de manufactura.
El Complejo Industrial de Resende recibió una de las inversiones más grandes en la historia de la industria automotriz local. La planta fue construida gracias a una inversión de 2600 millones de reales y es capaz de fabricar 200,000 vehículos y 200,000 motores al año. Desde abril del 2016, la planta de Resende exporta a mercados latinoamericanos como Argentina, Bolivia, Chile, Perú, Paraguay, Uruguay y Panamá. El Complejo Industrial de Resende se está preparando para empezar a fabricar el Kicks en los primeros meses de 2017, fortaleciendo así la capacidad de producción del vehículo para satisfacer la demanda de los clientes latinoamericanos.
En el Complejo Industrial de Resende, la sustentabilidad va más allá del uso de equipo y procesos productivos de última generación para fabricar autos y motores. Desde su proyección arquitectónica, el complejo industrial se concibió como una construcción ecológica y una de las plantas más sustentables de la empresa.
Los edificios cuentan con luz natural y soluciones de ventilación que reducen el consumo de energía y protegen el medio ambiente. Se dio especial atención a la implementación de prácticas para la eliminación de residuos, incluyendo la reutilización del agua y la extracción selectiva de desechos. El objetivo es reducir las emisiones de dióxido de carbono y de compuestos orgánicos volátiles liberados durante el proceso de manufactura. El fabricante de autos también ayuda a proteger el ecosistema en el que su ubica su planta.