Kia inició operaciones en su planta de Nueva León… un auto cada 56″ segundos.
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Ayer lunes 16 de mayo de 2015 inició sus operaciones fabriles la planta armadora de automóviles en Nueva León de Kia Motors de México, que tiene como meta fabricar hasta 300.000 automotores por año.
En presencia de Seong Bae-Kim, Presidente de la empresa en el país, fue entregado el primer automóvil modelo Kia Forte, hecho en la entidad, de la armadora instalada en el municipio rural de Pesquería, ubicada 30 kilómetros al norte de la capital del estado. En el acto también estuvieron el Secretario de Desarrollo Económico regional, Fernando Turner Dávila, así como el Alcalde de esa localidad, Miguel Lozano.
La planta cuenta con tecnología que permitirá construir un auto cada 56 segundos, lo que convertirá a esta planta, única en el país, en la base de exportación de la marca surcoreana para Norteamérica y América Latina.
La empresa dio a conocer que 80% de su producción está destinada al mercado de exportación en 80 países, lo que le generará un valor de producción a Nuevo León por 4.000 millones de dólares por año y convertirá la entidad en un centro generador de automóviles de clase mundial.
Como objetivo inicial, la armadora producirá 100.000 unidades de su modelo Forte en el 2016.
Kia Motors inició la construcción de su planta en el 2014, con una inversión inicial estimada en los 3.000 millones de dólares, con una planta laboral que alcanzará los 14.000 trabajadores en el 2017.
En materia de política, en todos lados se cuecen habas…
La construcción de la fabrica coreana está en medio de la polémica desde su anuncio. El anterior Gobernador de Nueva León, Rodrigo Medina, pactó mediante un contrato opaco incentivos por hasta 11.500 millones de pesos mexicanos. No obstante, al llegar el nuevo Gobernador dijo que los acuerdos serían renegociados, pues la administración estatal no entregaría los estímulos que eran francamente abusivos e ilegales.
Aun ahora, la administración de Rodríguez Calderón no ha cumplido con el acuerdo firmado por Medina, pues busca reducir por lo menos 5.000 millones de pesos los incentivos para iniciar una renegociación. Debido a estos desacuerdos, Kia no cuenta con planta eléctrica de capacidad total para alimentar toda la factoría, además de que no ha sido construido en su totalidad el drenaje pluvial en ese terreno de más de 300 hectáreas que, de acuerdo con los especialistas, se encuentra en una zona inundable.
Tampoco ha sido construida la instalación del ferrocarril, de 2 kms de extensión, lo que impedirá el flujo dinámico de la producción hacia la Unión Americana.
A falta de este transporte, serán usadas naves nodrizas que provocarán un caos en la reducida comunidad de Pesquería, que carece de infraestructura para la circulación de tráileres, según advirtió el Alcalde.
En un comunicado, difundido ayer, Kia dijo que continúa las negociaciones para llegar acuerdos que permitan liberar incentivos.
Comentaron que: “La empresa mantiene una continua comunicación con el gobierno de Nuevo León, así como la apertura para alcanzar soluciones viables que contribuyan al objetivo común de fortalecer la economía mexicana”.
Llamó la atención ayer la ausencia de representantes del alto gobierno mexicano. Es habitual que el Presidente Peña Nieto y sus ministros asistan a este tipo de inauguraciones. El que no estuvieran ayer en Pesquería fue interpretado como una posición expectante ante el conflicto, que ya se maneja en el ámbito legal, de la política y la diplomacia.