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¿Cómo, dónde y por qué?
En el Día de la Seguridad Vial, CESVI ARGENTINA hace su aporte en la investigación y prevención vial con un análisis de los últimos 10 años de la siniestralidad en rutas (2004-2014) en base a más de 4.000 reconstrucciones de siniestros de tránsito graves. Números elocuentes que muestran a la falla humana como la causa principal. Aquí el informe completo.
Desde sus comienzos, el único Centro de Seguridad Vial y Experimentación de Argentina, comenzó a trabajar en el estudio de las causas de los siniestros porque al saber cómo ocurrieron se puede comprender cuáles fueron los factores desencadenantes y, en consecuencia, buscar la manera de evitarlos.
El equipo de RAT (Reconstrucción de Accidentes de Tránsito) concurre al lugar del choque grave con lesionados y/o muertos en forma inmediata para relevar huellas y vestigios de lo que sucedió. Un material que luego es analizado en profundidad para realizar un informe técnico. En ese camino de búsqueda de la verdad se obtienen datos valiosos que queremos compartir en esta nota.
¿Cuántas veces nos hemos preguntado por qué ocurren los siniestros? Y seguramente en una mesa de amigos las respuestas pueden ser variadas. Sin embargo, las estadísticas de nuestro Centro de Experimentación y Seguridad vial son contundentes. En el 89 % de los casos la causa fue la falla humana. Sólo un 9 % correspondió al medio (ruta) y un 2 % al vehículo. Una conclusión que demuestra una vez más una realidad que no queremos reconocer: chocamos mucho porque manejamos mal.
Dentro de este gran protagonista de la siniestralidad que es el factor humano, tras nuestros relevamientos, pudimos establecer las fallas más comunes. El ranking lo encabeza la invasión de carril con 41,8 %. Es que los sobrepasos indebidos suelen convertirse en verdaderas trampas mortales, ya sea porque el conductor ingresó en una zona que no está habilitada para hacerlo, no calculó bien la distancia y no le alcanza el tiempo para evitar la colisión.
El segundo error que provoca siniestros es la distracción (15 %) que está cada vez más presente. Y en esto mucho tiene que ver la mala utilización de la tecnología. Utilizar la telefonía celular mientras se conduce ya sabemos los riesgos que implica. A 40 km/h se recorren 11 metros en un segundo. Si el conductor recibe un mensaje de texto, lo lee y lo contesta desaparece del tránsito durante 10 segundos.
En la lista de los pecados cometidos por quienes protagonizaron siniestros en rutas, siguen las maniobras abruptas (11.1 %), circular a una velocidad inadecuada (9,5%), no respetar la señalización (7,1%), la prioridad de paso (6,6%) y mantener una inadecuada distancia de seguimiento (5%), entre otros.
Al buen tiempo, mala cara
La creencia popular indica que los días de lluvia o con neblina intensa se producen mayor cantidad de colisiones. Sin embargo, según nuestra experiencia recogida en tantos de años de investigación siniestral, el 88 % de los choques se producen sobre pavimento seco, lo que evidencia aún más el alto grado de responsabilidad que tiene el conductor, como mencionábamos anteriormente. No hay excusas para una mala maniobra, los frenos no se bloquean, ni se pierde adherencia, ni la ruta se convierte en pista.
Sólo el 6 % de las colisiones se producen sobre pavimento mojado, un 3 % con humedad en la calzada y un 2 % en tierra o ripio.
Nuestros especialistas en seguridad vial también chequean el estado de las rutas nacionales y provinciales que recorren a través de las reconstrucciones. De esta manera pueden establecer cuáles son los defectos más comunes de la calzada. En esta clasificación, la falta de señalización vertical ocupa el primer lugar, con el 25,2 %. La siguen la falta de iluminación artificial (19 %), la ausencia de señalización horizontal (17,5 %) y la calzada deteriorada (14,8 %), entre otros.
¿Quiénes?
La investigación de CESVI ARGENTINA alcanzó también a los vehículos involucrados en siniestros. Allí surgió que el automóvil es el que más colisiona (42,5%). Luego aparece el camión (29,8%), pick up (11,5%), motocicleta (5,8%), utilitario (4,1%), colectivo (2,2%), maquinaria especial (0,4%) y otros (3,7) %.
De la base de datos proveniente de las compañías socias de CESVI ARGENTINA (equivalente al 40% del mercado asegurador) se concluyó que en los últimos 8 años el conductor de moto fue el que más lesiones graves sufrió en choques con el 44,73% superando al acompañante de auto (17,20%) y al peatón (15,89%). El resto de la clasificación lo completan el acompañante de motor (8%), el conductor de auto (7,62%) y el ciclista (6,56%).
Los números pueden ser muy fríos pero ponen en evidencia un tema caliente que puede tratarse analizando lo que dicen las estadísticas. Si la falla humana es la principal causa de choques y éstos se producen mayoritariamente en asfalto seco, hay que trabajar mucho más en la concientización y la prevención. Nunca olvidemos que la falta de educación vial es, en definitiva, falta de educación.