Dieselgate en el país de origen de la marca acuerdan reparar el truco en los modelos Polo e Ibiza
El Grupo Volkswagen comunicó ayer que la Oficina Alemana Federal de Vehículos a Motor (KBA) ha aceptado la solución técnica que la marca ofreció para corregir el trucaje en las emisiones de los modelos VW Polo y Seat Ibiza diesel de 1.2 litros que entraron en el Dieselgate.
VW revisará unos 460.000 vehículos en Alemania para que «tras la reparación los vehículos cumplan todos los requisitos legales» (informó agencia EFE).
El recall para solucionar el fraude que afecta a unos 9,5 millones de vehículos en todo el mundo de distintos modelos y marcas del Grupo Volkswagen, debería haber empezado el 30 de mayo pasado. Por diversos motivos la compañía no ha podido iniciar el proceso, lo que presenta dudas sobre si el objetivo de la marca es reparar semejante cantidad de modelos en el transcurso de 2016 (pulse aquí para ver todas las notas sobre este tema en PruebautoS).
La realidad es que VW se encuentra en medio de diyuntivas y aprietes propios de los querellantes. Por un lado está buscando solucionar técnicamente la reparar para que los motores cumplan en todo momento los requerimientos legales. Por otra parte está afectada por las querellas que recibe en distintos países. Estas son denuncias de usuarios que quieren una compensación económica por la manipulación como de accionistas que han visto como los títulos de VW se hundían en bolsa a causa del escándalo.
VW llegó recientemente a un acuerdo con un grupo de usuarios en Estados Unidos para compensarlos por el Dieselgate por un valor total de 15.000 millones de dólares. Y… barato no es!